miércoles, 18 de enero de 2012

La cobarde que sueña contigo-parte 5

Hola, ¿Me reconoces? Soy yo, la idiota que sueña contigo, si, la que a pesar de tener mil problemas alrededor, no puede dejar de pensar en ti ni un segundo...

¿Sabes? He leído mi horóscopo, decía que hoy era el día indicado para decirle a la persona que me gusta lo que siento por ella, bueno, obviamente no lo he hecho, que fácil parece ahí escrito, declararte, mostrar tus sentimientos, decirle a ese alguien cuanto te importa... ojala fuera tan sencillo, ojala todo se limitara a decirte, eh, me gustas, que digo me gustas, ¡me encantas!, pienso en ti todo el tiempo y sueño contigo casi desde que te conozco, cuando entras en la habitación lo cambias todo, nada es igual desde ese momento, el entorno se emborrona y parece que solo estas tu, y te miro, te miro todo el tiempo, cuando creo que nadie lo nota, o que no me estas viendo, yo te miro, y no puedo dejar de hacerlo, por más que lo intento, mis ojos siempre te acaban buscando, y mi alma reza para que esta vez si me mires, si notes que estoy ahí, para que te des cuenta al mirarme de que haría cualquier cosa para hacerte feliz, para que en una mirada pudieses comprender que soy yo la que puede hacerte feliz, de que siempre he sido yo...

Pero no, no es tan fácil, no puedo llamarte y decirte todo eso, porque te morirías de risa, pensarías que me he vuelto loca, y te verías en la obligación de bajarme a tierra, y ponerme los pies en el suelo, de decirme ¡eh, deja de soñar conmigo, porque eso que sueñas nunca pasará! si, te verías obligado a hacerme daño, un poquito al menos, porque ambos sabemos que eres incapaz de herir a nadie, así que lo suavizarías todo lo posible, pero seguiría doliendo, ambos lo sabemos...

Y ya nada sería igual, bueno, puede que siguiera soñando contigo, creo que eso nadie podrá quitármelo nunca, a pesar de saber que solo son sueños, o a pesar incluso de tu rechazo, creo que pase lo que pase, siempre volveré hacia ti, yo lo se, siempre lo he sabido, y si te digo lo que siento tu también lo sabrás, y ya nada será igual, porque cuando se ponen las cartas sobre la mesa, todo cambia, siempre, yo seguiría soñando contigo y en parte seguiría siendo yo, pero oculta bajo cuatro capas de tristeza y un par de vergüenza, tu lo notarías, te sentirías culpable, y dejarías de ser tu, a ver si con eso dejo de soñarte, a ver si con eso dejo de sufrir...

Y yo no creo que pueda volver a ser la misma después de escucharte decir NO, pero sobre todo no puedo permitir que exista un mundo donde tu, dejes de ser tu, porque el mundo no tiene la culpa de mis delirios, y no sería justo que la persona más buena que he conocido cambie, aunque sea un poquito para que yo deje de estar triste...

Así que, no, no te lo he dicho, y no podré decírtelo nunca, aunque con un poquito de suerte, lograra controlar mis nervios y no temblar en la segunda frase, ni desmayarme en la cuarta, aun con esa suerte, tendría que escuchar, un NO, y no creo que tenga el valor suficiente para oír eso...

Si, sigo soñando contigo, pero no tengo el valor para enfrentarme a ello, si, soy una cobarde.