domingo, 29 de julio de 2012

Es lo correcto

Esto es lo correcto, tiene que ser así, esto es lo único que puedo hacer, es lo correcto, se repetía una y otra vez. ¿Pero como iba a ser eso lo correcto? ¿En que cabeza cabe que dejarla marchar era lo adecuado? ¿Que era lo único que podía hacer?

¿Como iba a ser lo correcto verla recoger sus cosas para marcharse y no hacer nada? ¿Que iba a hacer el sin ella ahora eh? ¿Que iba a hacer con todo este amor que sentía por ella eh? ¿Ignorarlo? ¿ Tragárselo?

No, uno no puede tragarse el amor, ni ignorarlo, el amor es libre, se exalta y se respira por los poros de nuestro cuerpo sin que nos demos cuenta, entonces...¿Que iba a hacer el con todo este amor ahora? Pues lo único que podría hacer, vivir con el, y aprender a vivir sin ella...

Y eso hizo, decisión tomada, la vio recoger sus cosas y no dijo nada, y cuando ella le miro por ultima vez, noto su mirada que parecía cargarse de miedo solo de pensar en cruzar la puerta, y el la miro a su vez con su mirada oscura como dos pozos sin fondo y temblando, temblando todo el tiempo, tan seguro de que en el momento en que ella se marchase se iba a desmoronar como un castillo de naipes, pero no dijo nada...

No podía decir nada, ella se iba a cumplir su sueño, y el no podía pedirle que se quedara, no tenía fuerzas para hacerlo, lo mas importante, no tenia derecho a hacerlo, así que no dijo nada, la  dejo marchar sabiendo que amanecería todos los días sin ella y con su amor por ella tan intacto como siempre.

Esto es lo correcto, esto es lo correcto... se volvía a repetir, aunque esta vez, ni el mismo lograba convencerse.

jueves, 26 de julio de 2012

Ya lo sabes

Te sientas junto a mi y dejas caer tu espalda sobre mi pecho. Yo te abrazo y te atraigo mas cerca, y ya está, no intento nada más. Sólo te tengo abrazada y mientras aspiro el olor de tu pelo intento recordar cuando abrazarte empezó a ser suficiente, cuando empece a sentir que  con  tenerte a mi lado ya estaba bien, que no necesitaba nada más...

Y no lo recuerdo. No consigo ubicar el momento, pienso en lo feliz que me has hecho estos meses, en las cosas que me has enseñado, pienso en las veces en las que tu mera presencia bastaba para que todo fuera más fácil, más sencillo, cuantas cosas hice y conseguí solo con tenerte  a mi lado, dándome apoyo para hacer todo lo que  antes no me atrevía, todo lo que antes me ahogaba...

Y sin embargo, a pesar de pensar en todo ello, no consigo darme cuenta en que momento pasó, pero esta claro que pasó. En algún lugar del camino me atrapaste por completo. Me he enamorado de ti, y eso me aterra. Me aterra pensar que puedas irte, que me abandones. Me aterra que descubras que esto no merece la pena, que yo no merezco la pena. Me aterra pensar en tu marcha porque ya nada tiene sentido si no estas aquí,  y eso me aterra, me aterra y me encanta a la vez...

Estoy enamorado de ti, y quiero decírtelo, pero... ¿Como lo hago? ¿Como te digo esto sin que salgas corriendo?

Levantas la cabeza y me sonríes, yo te devuelvo la sonrisa y al mirarte entonces lo veo: Ya lo sabes, lo sabes desde hace tiempo, tal vez lo sabes incluso antes que yo mismo...

Sonrío al  darme cuenta una vez más de que sigues siendo más lista que yo, mucho mas, pero eso es algo bueno, porque de repente ya no tengo miedo, te acaricio el rostro y te aparto un mechón de pelo detrás de la oreja, y mirándote a los ojos, te lo digo, por fin te lo digo:

-Te quiero.

Sonríes e intentas fingir sorpresa, pero ambos sabemos que la mirada te delata, ya que me miras como si pensaras que he dicho lo más evidente del mundo, pero aún así te sigo el juego y también sonrío, y por fin lo dices:

-Yo también te quiero.